Conexiones curativas: Terapia Asistida con animales
La Terapia Asistida con Perro (TAP), terapia no farmacológica, consiste en incorporar un perro que ha estado educado específicamente para esta labor y un técnico en Intervenciones Asistidas con Perros que sea el guía para complementar los servicios y aportar una experiencia holística, vivencial, directa y no artificial en el ámbito residencial. El perro es una herramienta para motivar a los usuarios y facilita la comunicación, la autonomía, el estado de ánimo y sobre todo el hecho de querer repetir la experiencia.
Algunos beneficios de la TAP:
- Estimula las emociones.
- Refuerza el contacto con la naturaleza.
- El perro no muestra prejuicios.
- Mejora la autoestima.
- Promueve la responsabilidad y las conductas afectivas.
- Invita al juego.
- Facilitador de comunicación.
- Reduce la sensación de soledad y depresión.
- Hace reír y libera tensiones.
- Mejora la empatía.